domingo, 19 de junio de 2011

¿Crees que es teatro esto que te cuento? 9. Marxismo de Groucho y guerracivilismo

Un profesor y una profesora conversan mientras hacen cola para votar en las últimas elecciones sindicales. Él debe tener treinta años, ella ronda los cuarenta.

Profesor: -yo nunca voto, todos me parecen iguales. Pero bueno, este año, me da por hacerlo.
Profesora: -me parece muy bien. Tampoco voto. Nunca. Y menos en las elecciones generales, autonómicas o las que sean. Los partidos políticos son peores que los sindicatos.
Profesor: - Bueno, me refería solamente a las elecciones sindicales, en las otras siempre voto. Con lo que le hicieron a mi abuelo…, tengo muy claro a quién votaré siempre.
Profesora:- ¿Tu abuelo? ¿Por qué?
Profesor:- Luchó en el bando republicano durante la Guerra Civil, en Andalucía. Y al acabar la guerra, lo pasó muy mal.
Profesora:- Pues yo soy más marxista que nadie, y creo que en las próximas elecciones no se puede perdonar lo que nos han hecho. Piensa en los 200 euros que nos han quitado. Tendrías que pensártelo mucho y votar como yo, en contra de los que nos han recortado el sueldo.
Profesor: Eso es verdad. Y luego presumen de ser de “izquierdas”…
Profesora:- Y que te quede una cosa bien clara: nadie es más marxista que yo, pero lo que nos han quitado, se lo voy a hacer pagar en las urnas…

miércoles, 8 de junio de 2011

La manifestación del docente mediocre

Al docente mediocre no le interesa el conocimiento ni mejorar técnica o profesionalmente. Teme a la competitividad y a la excelencia. Consciente de sus limitaciones, se aferra a los mecanismos que sirven para excluir a quienes podrían realizar su trabajo mejor que él. Sabe que la puerta que cierra el paso a muchos aspirantes a ejercer la docencia en Baleares, es la que le otorga un privilegio al que no está dispuesto a renunciar. De ahí la manifestación preventiva de los estudiantes de Magisterio. Piden que la lengua catalana siga siendo un requisito, y no un mérito, para ser docente en las Islas Baleares. Temen que el futuro gobierno autonómico, con mayoría absoluta del PP, cumpla sus promesas electorales introduciendo “libertad y calidad” en la enseñanza. No consideran extraño que ellos puedan opositar y ejercer en el resto del territorio nacional, gracias a la lengua común, mientras que muchos otros no puedan hacerlo en Baleares. Valores como la igualdad, la libertad, la cooficialidad, y la excelencia, les parecen válidos, siempre que se apliquen fuera del territorio en el que se valen del adjetivo "propio". En realidad, no hacen más que poner en práctica la doctrina de la facultad en la que estudian: el docente mediocre devalúa las metas de la educación al servicio de la identidad, tanto como se rebaja profesionalmente a sí mismo.