jueves, 28 de junio de 2012

Pataleo en los claustros

A la impúdica instrumentalización -con fines políticos- de las aulas y los estudiantes que ha caracterizado últimamente a parte importante de los docentes, se suma un constante reguero de propuestas para movilizar contra los recortes al sector. Sorprende la absoluta ausencia de análisis racional ante la situación de emergencia económica que atravesamos, y el rechazo visceral de cualquier medida que mejore el uso de los recursos. De ahí que recojamos algunas de las propuestas que se están llevando a cabo en los centros de Baleares: hacerse una foto de los profesores con el culo al aire pintado de verde (esta fue la propuesta inicial, aunque finalmente se optó por tapar el desnudo con pancartas reivindicativas), la dejación absoluta de responsabilidades ante el curso próximo (elaboración de horarios, asignación de espacios, grupos, etc.) por parte de equipos directivos y jefes de departamento, o la dimisión en pleno de los equipos directivos, a los que por cierto, se ha llegado a calificar de cómplices por no abandonar sus responsabilidades. Una profesora de un instituto de Palma aprovecha la infantilización de los claustros para manifestar su temor a que la Conselleria le envíe a un falangista que la oblique a cantar el Cara al sol… En conjunto, no parecen propuestas edificantes ni ejemplares, que aporten mesura y equilibrio cuando más falta hace. Todo el mundo tiene derecho al pataleo, pero considerarse imprescindible hasta el punto de no asumir en ningún sentido las consecuencias de la ruina económica, es de una grave inconsciencia . Eso, por no citar la profusión de vídeos propagandísticos en los que se adopta el más absoluto maniqueísmo. A veces no se distingue a los profesores de los niños.