¿Deben los centros educativos gastar parte de su presupuesto en publicaciones sin contenido pedagógico alguno? ¿Qué sentido tiene que se suscriban a revistas o periódicos de clara tendencia política?
Gran parte de las escuelas e institutos de Baleares reciben la revista El Temps. La suscripción anual cuesta 145 €. Pues bien, suponiendo que al menos 200 centros estén suscritos –es probable que esta cifra sea mucho más alta- estaríamos hablando de un coste anual de 29.000€.
El sesgo ideológico de la revista a la que nos referimos –nacionalismo e indepedentismo catalanista- es totalmente irrelevante, aunque es un dato que habla por sí solo. No se trata de compensar este gasto absurdo suscribiéndose a otras publicaciones de otras tendencias, sino de cuestionar los criterios con los que se administra el dinero del contribuyente. El colectivo docente puede sacar provecho de publicaciones de claro contenido didáctico, pero cuando se trata de inclinaciones políticas, debería ocurrir lo mismo, por ejemplo, que con la religión: cada cual es libre de gastar su dinero como considere, pero no el ajeno.
Sería interesante completar los datos de esta entrada con el total de centros que reciben El Temps en todas las comunidades en las que el catalán es cooficial. Se trata de una publicación de alta calidad, en papel couché y a todo color, lo que asegura que se sostiene gracias a generosas subvenciones públicas. Y compete a las autoridades y equipos directivos de cada centro cuestionar las partidas de gastos en este sentido. ¿O es que no han oído hablar de recortes y de racionalización de unos recursos que son escasos y no son suyos?
